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El importe de la factura eléctrica ha disminuido para el consumidor medio de la Comunidad Valenciana en un 7,33% con respecto al mes anterior, según los datos calculados por la Fundación para la Eficiencia Energética de la Comunidad Valenciana f2e, de la que son patronos la empresa BP, el Ayuntamiento de Castellón y la Universitat Jaume I.
En enero de este 2018, la factura de la luz ha tenido un coste medio de 67,56 € frente a los 72,90 € del mes de diciembre del año pasado, es decir, una bajada del 7,33 % en la factura final. Desglosándola por conceptos, el usuario pagará 15,71 € por el término fijo de potencia; 36,09 € por el consumo de energía; 2,65 € por el impuesto de electricidad; 1,39 € por el alquiler del contador; y 11,72 € en concepto de IVA.
Si se compara con el mes de enero de 2017, la factura eléctrica ha sufrido una bajada de un 13,38 % ya que entonces se abonaron 77,99 €. Por lo que respecta al precio del kilovatio-hora (kWh), éste ha sido de 0,120537 €/kWh, un 10,43 % más barato que en el mes de diciembre y un 18,53 % más barato que en 2017.
La bajada se ha debido tanto a la mayor presencia de viento, que ha favorecido la generación de energía eólica, como a la reducción de la demanda eléctrica. Según datos del Ministerio de Industria, en la Comunidad Valenciana hay un total de 1.609.230 hogares acogidos a la tarifa regulada o precio voluntario al pequeño consumidor (PVPC), es decir, el 51% del total de consumidores.
La Fundación f2e recomienda, a priori, la tarifa PVPC para los hogares y contratos de menos de 10 kW de potencia y la opción de la tarifa de discriminación horaria, para quien pueda trasladar el consumo de electricidad a este horario. También aconseja a los usuarios que comparen tarifas con las diferentes comercializadoras de energía eléctrica para contratos mayores de 10 kW y casos particulares, ya que podrían encontrar ofertas que se puedan ajustar más a sus necesidades.
