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Casi tres minutos. Esa ha sido la duración que ha tenido el acto solemne de toma de posesión del cargo del que ha sido elegido nuevo president de Cataluña, Quim Torra. Hay quien lo ha calificado como el acto “más minimalista” que se recuerda en el Palau de la Generalitat.
El recién estrenado president ha jurado su cargo sin hacer referencia alguna a la Constitución española o al Rey y se ha limitado a prometer “fidelidad al pueblo de Cataluña”.
Torra ha acudido con su familia al acto y los únicos símbolos presentes han sido una señera, el medallón del president, que Torra no ha lucido, pero sí ha lucido el lazo amarillo en la solapa izquierda que simboliza el apoyo expreso a los políticos encarcelados por el referéndum ilegal.
