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Una operación policial conjunta hispano-francesa ha culminado hoy con la detención en París de un presunto yihadista vinculado con la célula terrorista que intentó perpetrar un atentado en el tren Thalys 9364 que cubría la ruta Amsterdam-París el 21 de agosto de 2015 con 554 pasajeros a bordo. La actuación de varios pasajeros evitó lo que pudo convertirse en una masacre terrorista.
Agentes de la Comisaría General de Información de la Policía Nacional, en colaboración con la Brigada Provincial de Información de Almería, han encabezado en España un dispositivo conjunto con los servicios antiterroristas franceses que ha posibilitado la detención hoy en París de un ciudadano marroquí de 35 años, por su vinculación con la célula terrorista encabezada por Ayoub El Khazzani, el presunto terrorista que viajaba pertrechado en ese tren con un fusil, una pistola y varios cargadores. La operación se ha desarrollado bajo la supervisión del Juzgado Central Instrucción nº6 y la coordinación de la Fiscalía de la Audiencia Nacional.
El ahora detenido en París, en situación regular en España, residía numerosas temporadas en su domicilio de Almería, donde no se le conocía actividad laboral o medio de vida alguna. Las investigaciones realizadas por la policía española revelaron que este ciudadano marroquí colaboraba con la célula que planeo el citado atentado prestando apoyo logístico, mediante el traslado de sus miembros entre diferentes países de la Unión Europea o facilitándoles los vehículos con los que llevarlos a cabo.
Vigilancias y seguimiento 24 horas para lograr su detención
Como consecuencia de la continua colaboración y cooperación mutua, las autoridades francesas solicitaron ayuda de la Comisaría General de Información de la Policía para proceder a la búsqueda y localización del detenido y proceder a su arresto por su apoyo a la organización terrorista DAESH en su objetivo de realizar atentados en países de la Unión Europea.
El presunto colaborador del frustrado atentado del tren de París, que se encontraba temporalmente en Marruecos, fue seguido por agentes de la Policía Nacional a su regreso a España, iniciándose un dispositivo de vigilancia 24 horas que ha posibilitado su detención por la policía francesa cuando se encontraba en territorio francés de camino a Bélgica.